domingo, 16 de febrero de 2014

Nueva Acrópolis en Málaga presenta el libro: El arte y la Belleza.

Queremos presentar el libro del filósofo y dir. de Nueva Acropolis en Málaga, Miguel Angel Padilla. Se trata de un verdadero referente del nuevo espíritu que trata de abrirse paso a través de un arte que se reencuentre con su atemporalidad y viva su presente con verdadera vocación de futuro.

EL ARTE Y LA BELLEZA
Edt. N.A. ISBN: 84-96369-11-0
Miguel Angel Padilla


De su blog extraemos algunos capítulos (http://decorarconarte.blogspot.com/)

ARTE Y CREACIÓN -UNA OBRA DE ARTE TIENE VIDA PROPIA

Hoy, la sensibilidad estética ha quedado relegada como algo secundario y sin importancia. Tanto es así, que ante una obra de arte, el hombre materialista, cerrado en su propia ceguera, no va a percibir la belleza que pueda expresarse en ella o el mensaje que pueda encerrar, sino cuanto vale en el mercado o el reconocimiento y prestigio del autor.
Cuantas veces se repite aquella anécdota de Picaso, ante un cuadro de un principiante. -A esa obra le falta aun algo para ser buena,- le decía; -¿qué maestro, que le falta? – le falta mi firma y será una gran obra de arte- contestó.
Un artista no es la firma. Su obra tiene que ser capaz de conmover por sí misma. La obra de arte debe de tener vida propia, tiene que ser capaz de desgajarse de su autor.
Pocos nombres de autores han llegado a nuestros días, desde aquellos tiempos lejanos donde se alzaron templos a la armonía y la belleza. Sin embargo, sus obras, desde Egipto a Grecia, desde India a América siguen conduciendo nuestras conciencias hacia regiones elevadas de la mano de lo Bello. Como máximo encontramos la firma simbólica como marca de una cofradía, o un nombre secreto. La obra no nacía para gloria de su autor, sino que en su transmutación a través de la creación artística estaba su Gloria. Era algo que le trascendía porque encarnaba aquello que estaba más allá de él, habiendo podido vislumbrarlo dándole forma en el mundo sensible.
En cada acto creador el artista funde su forma personal con la fuerza del Demiurgo, reproduce el poder de la creación armónica del Universo, en la medida en que despierta ese mismo poder en sí mismo. De ahí que la forma quiera reflejar su nombre secreto, el del Dios interior, y no la personalidad con que se asoma a este mundo.

El arte realmente es creación y aunque no pueda definirse únicamente como acto creativo, el arte se expresa a través de la capacidad de manejar la materia, de poder hacer que ésta responda a la propia voluntad para que hacer que encarne en ella lo que concibe la mente del autor.
Cuando hablamos de materia nos que referirnos a toda estructura capaz de ser percibida, es decir a la materia como extensión de la forma.
Así, la música, aunque se aleja de la materia densa, responde a formas puras, a estructuras sutiles creadas a partir de relaciones proporcionadas y armónicas. En la música, a las proporciones de espacio (sonidos) se unen los de tiempo, dando lugar a algo vivo, en movimiento.
De alguna manera, y han habido muchos filósofos que lo han mencionado a lo largo de la Historia, el hombre por medio de su capacidad creadora ha tratado de asemejarse a la función creadora de la Divinidad, del Logos o Inteligencia cósmica. Cuando el hombre intenta crear, no hace sino imitar ese mismo proceso creativo que utilizaría el Demiurgo o arquitecto Universal a la hora de construir las formas sobre las que se ha de asentar la vida.
Toda obra de arte, sea arquitectura, música, pintura, poesía, etc., es un modo particular de reproducir la creación del Mundo, ese proceso cosmogónico donde el caos, la materia primordial va a ser ordenada por el Teos, la mente del artista, haciendo emanar la Idea, el arquetipo, dando lugar a un Cosmos: la obra de arte.
Siguiendo con este patrón universal, el acto creativo se apoya entonces en el poder de manejar la forma. La forma es en esencia una estructura, una combinación de líneas de tensión combinadas en diferentes proporciones, a través de la cual puede circular una energía, puede expresarse la vida o llegar a manifestarse una idea. (la estructuras son para ser habitadas). Esto puede verse muy bien en una catedral gótica o en una composición musical.
Por lo tanto, toda forma necesita un “aliento” como esencia que la anime y le de vida. El arte se manifiesta entonces, como un acto de recreación de lo invisible en lo sensible a través del cauce de la belleza.
La creación implica síntesis por lo que la mente puramente analítica jamás podrá crear.
Una obra no es la suma de pinceladas, gestos o sonidos, la obra está más allá, preexiste en la mente del artista y aunque se exprese en formas jamás es generada por ellas.
El proceso creativo será entonces unir materia, forma y esencia. El artista tendrá que dominar la materia, percibir y conocer la forma y canalizar ese “aliento”. Debe ser en cierto modo un técnico, un filósofo y un mago, para recorrer el camino que le ha de llevar de artesano a artista y de artista a genioEste proceso exige de una gran voluntad y constancia para dominar la materia, de una mente clara para ver las formas esenciales y conocer los efectos que inducen, así como de una capacidad de elevación que nos permita ser el canal de inspiración.

Miguel Angel Padilla
Para ver más capítulos

domingo, 2 de febrero de 2014

Un año más Nueva Acrópolis participó en la organización y desarrollo del VI Congreso de dialogo intercultural e interreligioso en Málaga



Un año más Nueva acrópolis participó en la organización y desarrollo del VI Congreso de dialogo intercultural e interreligioso en Málaga organizado por la Asociación UNESCO AUNESCOPRODI que este año giró en torno a la necesidad de una ÉTICA UNIVERSAL

Numerosos ponentes de una extraordinaria calidad desarrollaron trabajos en torno a la necesidad de una ética Universal fortalecida desde los diferentes aspectos de la sociedad, la política, la educación, la ciencia y la religión. (Ver programa)

El Dir. de Nueva Acrópolis en Málaga y coordinador del Congreso desarrolló una ponencia titulada "Ética y éxito. La ética como factor decisivo de progreso y desarrollo económico y social" que suscitó un gran interés entre los asistentes.

El Congreso finalizó con la lectura de la "Declaración de principios en torno a una ética universal"firmada por los participantes . Sin duda un paso más en la larga andadura de ir construyendo un mundo mejor.








viernes, 15 de octubre de 2010

Compositor y espectador.

Cuando un compositor se sitúa frente a una página pautada en blanco, desea, entre ilusionado y preocupado, que algo o alguien acuda en su ayuda. En la antigüedad las Musas cumplían bien ese papel inspirador, pero el músico actual, supeditado a otras circunstancias, casi las ha olvidado. Sin embargo, es posible que, al igual que ocurre con la repetición cíclica de los temas musicales en una sonata, en un futuro cercano vuelvan a ser llamadas y buscadas.

En cualquier caso, con musas o sin ellas, son miles las páginas que se componen a diario y son cientos las obras que surgen cada semana de la mano de músicos profesionales. El siguiente paso, su difusión, se realiza a través de discos compactos y bandas sonoras de películas, que constituyen actualmente el medio más rápido para que esas partituras atraviesen el espacio sonoro y sean conocidas. Ahora bien, intentemos elevar nuestra conciencia durante un momento por encima de la vorágine comercial que ello supone; preguntémonos, con visión un poco más objetiva, qué causas, qué razones llevan a producir y distribuir determinada música y no otra. Es muy posible que cada uno obtenga una respuesta diferente, pero teniendo en cuenta que todos vivimos en la actualidad bajo el signo de dos terribles divinidades, el Tiempo y el Dinero, también cabe la posibilidad de llegar a esas conclusiones. Así pues, y más allá de las máscaras engañosas (también denominadas "publicidad") que envuelven esas ideas musicales, existen dos premisas que condicionan su salida al mercado como productos consumibles: venta a corto plazo (Tiempo) y sustanciosa ganancia (Dinero).

Llegados a este punto, creo apropiado señalar la encubierta vanidad que se desprende de nuestros libros sobre "Historia de la Música". En ellos suele decirse que desde hace dos siglos nos liberamos de la figura del "compositor por encargo", que ya el músico compone lo que quiere, libremente, sin condicionamientos. Pero, ¿es que acaso son "libres" los actuales compositores que firman contratos comprometiéndose a una determinada cantidad de canciones por año (muchas veces con temas prefijados), temas u obras con una duración muy limitada en la mayoría de los casos, giras y conciertos que ellos no eligen, y un largo etcétera?
Un refrán popular aconseja no mirar tanto la paja del ojo ajeno y percatarse más bien de la viga propia. De lo contrario acabaremos creyendo que vivimos en un tiempo infinitamente mejor a cualquier otro anterior. Si hacemos dogmas de lo que sólo son teorías, manipulamos la historia, exageramos errores de épocas pasadas y disimulamos los actuales, llegaremos a ese dudoso género de conclusiones. Por ejemplo, y en el caso que nos ocupa, a nadie se le escapa que la canción más vendida no tiene por qué ser la mejor, y sin embargo solemos asociar ambas ideas.

Tras lo expuesto, es inevitable hacer referencia al segundo protagonista de este artículo, los espectadores, que somos los que recibimos el mensaje de los compositores, o mejor dicho, de algunos de ellos, elegidos generalmente por razones extramusicales. Es cierto que es delicado tratar estos temas, pues ya se sabe que en cuestión de gustos cada uno tiene el suyo, pero ello no ha de evitar que exista en cada uno de nosotros una revisión sobre si lo que llamamos "nuestros" gustos verdaderamente lo son, o simplemente nos han sido implantados. De igual forma que si queremos alimentarnos físicamente no comemos cualquier producto, aunque esté magníficamente precintado y presentado, tampoco deberíamos aceptar "basura emocional", por mucho dinero que nos haya costado o por mucha calidad externa que recubra esta composición. Cada uno, por medio de una evaluación personal y consciente, alejada de los reclamos publicitarios, ha de vigilar cómo alimenta sus emociones y sentimientos, al igual que hacemos cuando hemos de alimentar nuestro cuerpo. En otras palabras, hay que tener presente que no todas las combinaciones de sonidos y tiempo que una productora discográfica nos presenta son saludables.

Hagámonos ahora una terrible pregunta: ¿Cabe la posibilidad, si sumamos todo lo dicho, de que las directrices de la Música actual se encuentren en manos extrañas, es decir, en empresarios alejados de objetivos artísticos, pedagógicos y culturales, o en personas cuya mayor aspiración consiste en un despacho cada vez más grande y lujoso?
Ya que en el inicio hemos citado a las Musas como esos seres capaces de generar la inspiración necesaria para el artista, no está de más recordar una vieja historia de la antigua Grecia que habla de dos gemelos, Anfión y Zeto, y que puede ayudarnos a tomar una decisión en este asunto.

Cuenta el mito que Lico, gobernador de Tebas en aquel momento, temió por su futuro al enterarse de la vuelta de Antíope, hija del antiguo administrador del reino y madre de los gemelos. Así tuvo la horrible idea de encerrarla en una oscura prisión, abandonando a los hijos a su suerte. Estos tuvieron la fortuna de ser encontrados por unos pastores y así salvaron la vida. Por voluntad de Zeus, las Musas se ocuparon de su educación. Zeto mostró afición por las artes manuales, la agricultura, la ganadería y la lucha, y Anfión, a quien Hermes le regaló la lira que él mismo había inventado, se dedicó a la Música.
Cuando los dos jóvenes príncipes se hicieron mayores y llegaron a tener suficiente valor y destreza, decidieron vengar las injurias que su madre había recibido de Lico y su esposa Dirce, la cual odiaba a Antíope por su belleza. Y así fue. Una vez liberada su madre reconquistaron Tebas y reinaron en ella. Al margen de la importante labor de Zeto, que no viene al caso, Anfión invocó a los Dioses y a las Musas que siempre le habían protegido; al ponerse a cantar y a tocar la lira, y mediante el hechizo de sus acordes, que hacía que las piedras se desgajasen y ajustaran solas, como si fuesen colocadas por la mano de un hábil arquitecto, ciñó de murallas y torres la ciudad de Tebas. Y las casas rústicas donde vivía la gente, gobernada antes por el injusto Lico, se convirtieron en soberbios palacios.
A medida que se acerca el fin de este milenio aparece la necesidad de atesorar los aciertos conseguidos, pero además se hace imperioso iniciar el nuevo siglo sin cargar con viejos errores y vanidades que obstaculicen la construcción de un nuevo Arte. Más allá de la hermosa leyenda griega, si es admitido el gran poder del Arte en la sociedad, y el de la Música en particular, es conveniente preocuparse por los caminos que pueda tomar. Si hacemos un Arte que recoja lo mejor de los clásicos conjugando los elementos válidos de la actualidad, no podemos llamar artista o compositor a quien fundamente sus creaciones en emociones burdas, en la originalidad por la originalidad, en "romper esquemas" sin aportar nada válido; y tampoco dejar que los destinos de la Música estén dirigidos por la avidez de fama o dinero fácil.

Tampoco se trata de poner limitaciones al compositor, más bien es una cuestión de salud estética, de no dejar que la Música retroceda casi hasta el salvajismo, como habría sucedido en Tebas de no haber vuelto Anfión. El ser humano tiene derecho a un Arte que se caracterice por su contenido trascendente y, que en lugar de volcarse hacia lo vulgar y cotidiano le ayude a remontarse hacia lo bello. Esa es la gran responsabilidad del artista y compositor.
Pero además de la figura concreta del músico, sea como intérprete o como compositor, existe también la del humilde ciudadano de a pie, es decir, cada uno de nosotros, pues también tenemos una responsabilidad a título individual, en cuanto a la elección de nuestra música. Ésta no debería improvisarse, hace falta atención y conciencia. En la medida de nuestras posibilidades, cada uno puede ser un pequeño Anfión, constructor de su ciudad ideal, con fuertes murallas que nos permitan defendernos del ataque de un arte especulativo, degenerado en producto comercial. Una ciudad interna que también poseerá bellos palacios donde desarrollar nuestros mejores sueños.

Quizá todo dependa de no dejar pasar las oportunidades que la vida nos ofrece, algo tan simple a veces como decir "no" ante una moda musical pasajera cualquiera que, a poco que lo pensemos, incluso nos parece repulsiva; o decir "sí" a una melodía simple, actual o centenaria, pero que nos emocione y haga vibrar lo mejor de nosotros, aunque no esté en la lista de discos más vendidos.
El espectador ha de superar la actitud pasiva que provoca el momento en que vivimos, y ayudar de esta forma a la desaparición de todos los parásitos que se han adueñado del mercado musical, dejando el lugar un poco más limpio y aireado. Es posible entonces que volvamos a concebir la Música (y el Arte en general) tal y como la describió Carlyle:
"…una especie de inarticulado e insondable lenguaje que nos conduce al borde de lo infinito y por un momento nos permite contemplarlo."

BIBLIOGRAFÍA:
El Arte y las emociones.
C. Jinarajadasa. Ed. Orión.
El Templo de las Musas.
Ed. Luisa Roquero.
Diccionario de Mitología.
P. Grimal.
Cómo escuchar la Música
A. Copland, F.C.E

Carlos A. Farraces

viernes, 20 de febrero de 2009

Se inauguró la exposición de Diego Ceano con gran exito de público.

El lunes día 16 de febrero se celebró la Inauguración de la Exposición de  Pintura en la Sala Al-Malaquí de Diego Ceano titulada Naif Formatos que se desarrollará hasta el próximo día 6 de marzo. El acto fue presentado por Miguel Angel Padilla, director de la Asociación Nueva Acrópolis en Málaga, que agradeció la labor realizada por Diego Ceano como coordinador de la Sala Al-Malaquí desde el año 2001 además de destacar su trayectoria como escritor costumbrista (más de 27 libros) y desde hace unos años su proyección en la pintura. También el reconocido pintor Francisco Moreno Ortega dijo unas palabras sobre la obra de Diego. reconociendo una evolución en su pintura que le define en su estilo narrativo naif. Se ofreció un cóctel de bienvenida para los visitantes y amigos que se acercaron a acompañar en el evento a nuestro querido Diego Ceano, asistiendo varios pintores y amigos de entidades culturales de la ciudad.









domingo, 23 de noviembre de 2008

Artistas y Artesanos

Trascripción de una conferencia dictada por el profesor Jorge Algel Livraga, fundador de Nueva Acrópolis en 1957

Perdonad los preámbulos de la presentación, pero mis discípulos gustan de hablar de mis títulos y de lo poco que pude hacer en esta vida. Yo lo acepto como una expresión de amor –que es el más viejo lazo que une a todos los hombres y a todas las mujeres- “je suis un petit homme”, como dirían en Francia: soy un pequeño hombre al que simplemente le han puesto una gran capa en un mundo en el que hacía falta que alguien se atreviese a llevar la capa que envolviese y encerrase aquellos Ideales que no son tan sólo del ayer, ni del hoy, ni del mañana.... que son de siempre.

Dichos ideales no pertenecen a ninguna raza o cofradía especial de idealistas, sino a toda mujer, todo hombre que tenga vida interior, que sepa buscar a través de las cosas su propio sendero, su propia identidad, su propia capacidad de relacionarse con aquellos otros hombres y mujeres que le rodean.

En Nueva Acrópolis hemos creado una vieja forma de oratoria, aquella que no tiene papeles donde uno lee, aquella que se van creando en el momento.

Se trata de transformar de nuevo este arte de la Oratoria, este arte de poder ponerse en contacto con los demás, de compartir aquellas cosas importantes, necesarias y que, ultérrimamente son –y perdonad que recurra a un ejemplo tan conocido- la “sal de la vida”: ese pequeño grano de sal que le da un poco más de sabor a todas las cosas.

¿Cuándo empezó el arte en el mundo?. ¿Cómo podríamos fijarlo?. Ya pasaron las épocas de los muy bien intencionados científicos del siglo XIX que pretendían conocer el año en que había sido inventada la rueda, el año en que se había descubierto el fuego, el año en que el hombre había navegado por primera vez.

Hoy, en pleno siglo XX, tenemos, dentro de todos nuestros problemas, una gran ventaja, que es la que tenía Sócrates, el que recogió la frase que preside este podium: “Conócete a ti mismo”. Él sabía que no sabía. Hoy los historiadores sabemos que no sabemos. Que cada descubrimiento arqueológico, cada nuevo documento, cada nueva interpretación, hace retroceder más y más los orígenes de las cosas.

Hoy ya no podemos decir que la rueda no existía en América, por ejemplo, porque todos los museos de América están llenos de objetos con ruedas. Hoy ya no podemos decir que la civilización se inventó con el ladrillo, puesto que eso excluiría a la ciudad de Menfis de Egipto, que está hecha con mármol y con piedra.

Hay muchas cosas que hoy no podemos decir. Pero sí podemos decir que el hombre, desde que es hombre, ha hecho arte. ¿Qué es hacer arte exactamente?. Yo no querría de ninguna manera caer en las definiciones de los libros, porque para eso tenéis enormes bibliotecas, e incluso la humilde biblioteca de Nueva Acrópolis que está a vuestra disposición.

Existen en la Naturaleza una serie de planos. No creemos que la Naturaleza esté conformada tan sólo por el mundo físico, de ninguna manera. Es obvio que más allá del mundo objetivo existe algo más.

Si cerramos todas las puertas y ventanas y ponemos en el medio de la sala un pequeño transistor de radio, por las ondas hertzianas han de venir las palabras que están pronunciando otros hombres, otras mujeres a cientos de kilómetros de distancia. Es obvio que ni nuestros oídos podrían captarlo, ni las paredes lo detienen. Hay algo más allá de lo estrictamente físico...

Y si hay algo más allá de lo estrictamente físico y objetivo, si hay algo más allá de lo estrictamente energético, y aun de lo psicológico y de lo mental, habría entonces una serie de mundos “tangenciales” (no voy a hablar de los mundos “paralelos”, porque serían paralelos tan sólo en parte. Sabemos que el espacio es curvo y por lo tanto tendrían que ser “curvamente paralelos”, cosa que de todos modos llevaría a un reencuentro final).

¿A quién no le ha ocurrido que en un momento cualquiera y sin ninguna preparación mística de ningún tipo a veces sienta como un especial estremecimiento?. Habréis sentido que en determinado momento estabais entendiendo la Naturaleza de otra manera. Ahora las gaviotas que antes eran simplemente manchas blancas sobre el mar cobran para vosotros un significado. Ahora el horizonte al que antes veías de una manera óptica tiene otro sentido. Y las piedras lejanas parecen que fuesen buques fantasmas que se fuesen acercando a nosotros desde la niebla de lo desconocido.

Nos sentimos inmensamente solos, y a la vez inmensa y ricamente acompañados. Percibimos que hay un dios, un algo en todas las cosas. Miramos con curiosidad infantil cómo se abren y cierran las manos de la espuma para coger la inapreciable arena.

En esos momentos es cuando se revela el artista que existe, en todos nosotros y la posibilidad de tomar contacto con los planos superiores de la Naturaleza.

Arte no es el contacto con lo de abajo, sino con lo de arriba. No es cuando el oro se vuelve arena, sino cuando la arena se vuelve oro. Cuando las gaviotas empiezan a ser de marfil y las olas se tornan de jade; cuando las montañas se tornan lapislázuli.

Cuando los ruidos se convierten en música y arpegios, cuando hay una temática en todos los sonidos de la Naturaleza; cuando nosotros mismos vibramos con todo ello.... cuando nuestros ojos se llenan de lágrimas, o nuestra boca se llena de sonrisas. Cuando apretamos los puños sin saber por qué, contra qué luchar... o cuando los abrimos y los hundimos en la arena de la playa...

El artista es entonces u pontífice; es un puente, una conexión, una relación entre el mundo invisible y el mundo vi-sible. Es aquel que es capaz de interpretar lo secreto, lo escondido, lo que vulgarmente no se ve, y lo trae a nuestro mundo, bien bajo la forma de música, de pintura, de escultura, de arquitectura, para que todos podamos participar de ello.

Por eso los griegos se referían a las Musas, y éstas abarcaban temas que hoy no nos parecen propios del arte. Por ejemplo, Mnmosine, la Musa de la Memoria y del recuerdo, y por tanto de la Historia. De tal suerte, la Historia era para ellos una forma de arte, porque en la raíz etimológica de la palabra “arte” está el “hacer” o sea, el poder plasmar. Es el gran milagro de poder plasmar en algo perceptible las cosas que son imperceptibles. El artista es una suerte de mago que percibe las cosas invisibles, que oye lo insonoro, que ve todo lo que no se puede percibir, que palpa y toca masas que los demás no ven, y luego lo lleva al lienzo, al instrumento, al mármol o a la madera.

El artista entonces es aquel que logra esa altura suficiente, natural, como para poder realmente llevarnos a participar con él de esas bellezas.

Es evidente que los conceptos del arte cambian con el tiempo. Hoy tampoco podemos decir que los egipcios, por ejemplo, no conociesen la perspectiva. Algunos se han quedado detenidos en los libros de Máspero, pero quienes hayan avanzado saben perfectamente que los egipcios conocían la perspectiva.

Yo tuve la suerte de ver repetidas veces las pinturas más viejas del Antiguo Imperio –las que están cerca del complejo de Saqqara y Menfis- y he podido comprobar de qué manera conocían a la perfección la perspectiva. Daban entonces a la figura humana esa especie de rigidez, esos ojos frontales, ese rostro de lado, ese torso de frente, con un sentido mágico, y esto tan sólo se aplicaba a los dioses y a la figura humana. Los peces, las aves, los hipopótamos, los papiros, las palmeras, el río, todo corre de manera natural. Pero en medio de esa naturaleza está “otra naturaleza” que ha sido tocada por las manos de los dioses: la presencia del hombre.

Cuando vemos en un bronce de la Dinastía Ming, por ejemplo, que todos los rabos y las colas de los animales tienen una forma flamígera, podríamos pensar que se trata de un mero motivo ornamental. Sin embargo, el sentido que subyace es que en todos los animales, y en todos los seres, habita el fuego.

En nuestra pequeña colección, que algunos veréis cuando termine esta charla, hay una cerámica del Período Tang, “cabeza blanca”, en la cual se puede apreciar una suerte de manto hecho con cerámica vitreada. Eso tiene todo un oculto significado, así como su cabeza blanca de caolín.

Pero se pierden estos significados, hoy nosotros mismos, en España, los que hemos visto las cuevas de Altamira, no entendemos bien qué son esos animales superpuestos. No aceptamos tampoco la explicación simplista de que son una meras representaciones de caza. Creemos que más allá de la caza física existe una “cacería espiritual”, de potencias de la Naturaleza.

Y no entendemos de técnicas; por ejemplo, ¿cómo han hecho, en las grutas de Altamira, con tan poca profundidad -aunque hoy se ven amplias por haber sido excavadas artificialmente en el siglo XX- para utilizar unas formas de iluminación que no han dejado hollín ni ninguna otra huella de ningún tipo en el techo?. Parece que hubiesen utilizado algo así como la electricidad. Obviamente, eso demuestra un dominio de la técnica que hoy hemos perdido.


La técnica está también en relación con el artista. ¿Cuántas veces soñasteis edificar un palacio hecho con los mejores materiales?. Un palacio de oro, de plata, un palacio de cristal. Mas como no tenemos ni el oro, ni la plata, ni el cristal, no lo podemos hacer...

¿Cuántas veces vemos extraños colores que querríamos fijar para siempre?. Situaciones irrepetibles. Pero no tenemos la capacidad de poder hacerlo. Porque aun aquellos que creemos que no es la primera ni la última vez que venimos a este mundo; sabemos que las situaciones son irrepetibles. Jamás la misma hoja seca estará junto a la columna de mármol. Jamás su reflejo se posará sobre la gota de rocío. Es un momento único, irrepetible, algo que tan sólo se ve en un instante.

Pasarán los milenios, las civilizaciones, pero ya nunca más se volverá a repetir ese instante... De ahí que la vida es completa, enorme y rica. Porque a la vez que es continua, inacabable e inextinguible, también tiene hechos propios que no se van a repetir nunca jamás.

Muchas veces oiremos a un orador. Muchas veces, tal vez, tendré yo el placer de hablar a un grupo humano en esta mi querida España... Pero nunca más volveremos a estar como estamos ahora, sentados exactamente igual. No estarán todos los que están, habrá otros oyentes... No estaré yo como ahora; serán diferentes los ruidos, los sentimientos o las circunstancias externas. Este momento que estamos viviendo, pues, es único e irrepetible. Y tendríamos que apresarlo con todas nuestras fuerzas, porque no es algo que pueda repetirse de nuevo. Es “algo” que constituye uno de los pasos de una larga marcha... la larga marcha de la evolución de las cosas. Así pues, podemos decir que hasta en los más mínimos detalles, estamos “innovando”.

El artista entonces es aquel capaz de ser un “pontífice”, una especie de comunicación entre el mundo de los arquetipos de los Dioses y nosotros, y además de plasmar esos arquetipos en la tierra. Muchos soñaron con la música wagneriana, pero tan sólo Wagner fue capaz de crearla, aunque no fue comprendido al principio. Tan sólo él va a crear esas grandes interpretaciones orquestales y a reutilizar la voz humana como si fuese un instrumento más. Tan sólo Chopin va a poder extraer de las pequeñas cosas, así sea la caída de una gota de agua, una temática recreable en un romanticismo que bien sé que hoy no está de moda, pero que sigue siendo hermoso.

Además –y lamento no poder decirlo en italiano, porque en ese idioma resulta más expresivo-, en cuanto a las cosas “de moda”, francamente me importan un pimiento.

Cambian las costumbres, cambia la forma de vestir, de comer. Si nos vamos a aferrar a lo pasajero nos volveríamos locos perdidos. Andar sin sombrero en la época de nuestros abuelos, por la gran vía, era algo inconcebible. En cambio ahora, cuando yo, que soy bastante calvo, me pongo sombrero en invierno la gente me mira como si viese pasar una seta a un hongo.

¿Dónde está la verdad?. ¿Quo Vadis?. No podemos saberlo. Podemos saber aquello que es “esencialmente cierto”. Todo lo demás pasa y se va... de ahí que no nos importan las modas. De ahí que creamos que el arte debe ser siempre bello, siempre armónico. No algo intelectual que tenga que ser “explicado” para una suerte de “iniciados”. El arte tiene que entrar en nosotros de manera intuicional. El artista tiene que lograr llegar a nosotros sin necesidad de que lo intelectualicemos.


¿Sabemos el nombre de quien hizo esta pequeña estatua de terracota italiana que aquí vemos?. No, pero es hermosa. La hermosura trasciende el nombre, la personalidad, es como un espíritu que va más allá.

Cuando nuestros versos, nuestros libros, nuestras obras pierdan su carácter personal, quedará sin embargo su mensaje para elevar a otros, para ayudarlos.

Ni siquiera estamos seguros de que realmente La Odisea –por dar un ejemplo- sea de Homero, y muchos discuten hasta la paternidad de las obras de Shakespeare. Eso es importante en una especialidad de la Historia, pero no en cuanto a la “captación artística”.


Debemos retomar entonces, más allá de todas las modas, el culto a la Belleza que, en cierto modo, según Platón, sería también el culto al Bien y a la Verdad. No podemos seguir viviendo en medio de monstruos, de ninguna manera.

Hace poco tiempo, saliendo de la ciudad para dar una conferencia, pasé cerca de un parque donde había un extraño “monumento”, y pregunté: “¿Qué es esa caja de zapatos?”. Me contestaron. “Es el monumento a la Constitución”. Para mí era algo por donde se entraba por un lado y se salía por el otro.

Francamente, ni aun desde el punto de vista simbólico tiene ningún sentido. Y si por cada constitución vamos a hacer una caja de zapatos, esto va a parecer una zapatería.

Es obvio que hay que referirse a cosas que sean más durables, más bellas. Hemos llegado desgraciadamente muchas veces, en este momento histórico, a recurrir a la simple deformación de las cosas. Por ejemplo, una estatua como ésta, que está al costado del escenario, es una reproducción de la Venus de Milo, dicen que no es arte. Pero si la doblamos por el medio o la serramos, entonces sí podríamos titularla: “Hambre en el pueblo mientras sueña...” o si la ponemos frente a un señor desnudo, podríamos titularla, por ejemplo: “¡No te puedo abrazar!”. Esto que nos hace reír, nos hace también comprobar los absurdos errores que podemos cometer y nos hace ver también que podemos recrear un Mundo Nuevo, un Mundo Mejor.

¿Qué son los artesanos?. ¿Quiénes son esos señores que ponen un poquito de barro en una pequeña rueda, le dan con el pie y casi milagrosamente comienza a levantarse hasta adoptar una forma?. ¿O esos otros que soplan y el vidrio adquiere extrañas manifestaciones?.


El verdadero artesano es aquel que pule la madera de la mejor forma posible. Que cuando pone un vidrio en una ventana, lo pone bien y no se sale al día siguiente. Que cuando nos arregla las gafas, nos sirven y no se caen al suelo cada vez que inclinamos la cabeza. El verdadero artesano es digno de todo nuestro respeto. Es el artista del pueblo, el artista que vive en todos. El verdadero artesano es aquel que mira con su simple vista para ver si el surco está bien trazado. El verdadero artesano es el que empuja con un simple dedal para que pueda pasar el hilo a través del cuero y de la piel, el que puede dirigir las aguas, para que haya mejores cosechas.


No debemos despreciar al artesano. El verdadero artesano es la base histórica del arte. Sin artesanos, no habría arte. Si alguien alguna vez no hubiese extraído de la cantera un trozo de mármol pentélico, Praxíteles se hubiese quedado sin poder tallar.

Hace falta el artesano y hace falta el artista. Falta aquel que extrae la materia bruta, y aquel que la trabaja y la convierte. Hace falta el que reúne las hojas en el alejado bosque, y el que las sabe manejar para que se conviertan en remedios eficaces: el médico.

Nuestra posición filosófica es, respecto al artesano, la de darle el mayor valor. Para nosotros el Trabajo no es una maldición de Dios; por el contrario, es una escala para subir, para manifestarnos. El Trabajo realmente ennoblece, Las verdaderas noblezas no son aquellas que se reciben simplemente porque uno sea embajador en un lugar o en otro. Son aquellas que se reciben en el alma por haber hecho trabajos útiles a la Humanidad y a sí mismo.

El hombre ha olvidado en parte su capacidad de trabajar. Dentro de este mundo materialista en donde todas las cosas se repiten y se nos robotiza hasta llegar a parecer máquinas vivas con ojos o con bigotes, debemos resurgir y humanizar las cosas.

Entre las ruinas de Pompeya se encontró una especie de horno en el cual se cocía el pan. En ese horno, bajo la lava del Vesubio, se hallaba una suerte de “croissant” o masa de panes. A cada una de las piezas de su horno, aquel viejo panadero le ponía el sello: “Yo, fulano, lo hice”.

Ante este gran anonimato que nos trata de disolver, y que nos ha convertido en una masa; ante este gran anonimato que nos ha robado el nombre –porque ya ni se nos pregunta cómo nos llamamos- sino el número de Documento que tenemos; ante este enorme anonimato, debemos levantar la bandera de una nueva Humanización.


Queremos que haya hombres, dentro de miles de años, que puedan ver nuestras obras, nuestras pequeñas obras. Y sientan lo que nosotros sentimos ante el Partenón o ante las Pirámides, o aunque sea ante una lámpara romana.

Queremos que haya hombres y mujeres en el futuro que estén comunicados con nuestra Obra. Que no pasemos por el mundo como seres estériles.

Queremos pasar cantando como el agua. Queremos realmente hacer fructificar el lugar en que pisamos y que nuestro paso sea benéfico para todos.

Y aunque seamos absorbidos por la corriente histórica, hagámoslo como el agua, para que crezcan nuevas plantas, para que haya nuevos frutos. El principal, el primero de ellos: la esperanza.

Necesitamos recobrar la Esperanza. Necesitamos recrear el Arte que tenemos dentro y la capacidad artesanal de las gentes. Que tengamos el orgullo de aquello que fabricamos, no sentir que es una maldición. Que en el mundo pueda haber una verdadera fraternidad; que saltemos por encima de las vallas de las contradicciones, de las luchas de clase. Que estemos en la realidad; que hay nada más que una Humanidad y que esta Humanidad debe enlazar las manos fuertemente, hasta clavar las uñas en la carne para no separarnos, para estar juntos, para hacer primar de nuevo el Reino de los Sueños.

No vamos tan sólo a soñar... vamos a hacer primar el Reino de los Sueños. Vamos a hacer que los Sueños encarnen de nuevo. Que el Cid vuelva a cabalgar. Que otra vez las Damas tengan la inspiración que tuvieron. Que otra vez haya héroes. Que otra vez el joven sea joven; que nos alegre con sus cantos y con sus bromas. Que otra vez los ancianos nos aconsejen. Que las máquinas nos obedezcan. Que la naturaleza esté limpia y pura para recibirnos. Que el amor se pose en nuestros labios, que nos deje un poco de belleza.

Limpiemos el mundo empezando por nosotros mismos. La limpieza, la verdadera higiene espiritual, es la mejor forma de arte. Y el acto de hacerlo es la mejor artesanía.

Dios bendiga el Trabajo, dios bendiga el Esfuerzo. Dios bendiga a los humildes que tallan la madera y modelan el barro.

Dios bendiga a aquellos otros, los elegidos de los dioses, que pueden plasmar en letras, en música, en olores, aquellas cosas tan hermosas que se nos escapan al resto de los hombres.

Artistas y artesanos van del brazo hacia un Mundo Mejor. Ellos deben marcar, en medio de esta noche, la luz del horizonte que indica que ha comenzado a amanecer.







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martes, 30 de septiembre de 2008

El arte: una fuerza de la naturaleza

El Arte comprende fascinantes maravillas, mundos escondidos a los ojos de lo cotidiano. Es un sendero que nos lleva a los desconocidos parajes donde moran los arquetipos.

El Arte y la Naturaleza

La Naturaleza es la condensación material de un desconocido Universo en todo su despliegue de fuerzas fascinantes y aterradoras. El Arte entiende el proceso de la Naturaleza para imitarla, pero no tan sólo copiando su forma, pues el verdadero Arte no expone los fenómenos tal como son, sino tal como deben ser. El verdadero Arte investiga en los actos generativos e imita a la Naturaleza en dicha generación, creando el soporte material de formas sensibles de armonía.

Las fuerzas de la Naturaleza desbordan al hombre y lo hacen consciente de su pequeñez, de ser un punto perdido en un universo infinito. El artista dotado de sensibilidad es capaz de vencer sus limitaciones y mediante la magia de su arte reducir a trazos visibles las energías cósmicas.

El artista se torna mago, sumo sacerdote de la Naturaleza, que por su cercana familiaridad con sus procesos ha descubierto el inquietante secreto de la creación, y con sus obras nos revela ocultas ofrendas, haciendo eco de lo que la Naturaleza todavía no es capaz de proferir.

El Arte y los arquitectos

Un pintor no pinta simplemente a una madre, sino al ideal de la maternidad; no pinta a un soldado, sino al ideal del heroísmo. En una palabra, aquello que su imaginación puede captar como espejo de un ideal. Igualmente, cuando un poeta describe la melancolía, hace de su emoción un espejo en el que se refleja la melancolía de millares de personas.

Cada hombre tiene en su interior los arquetipos de toda la Humanidad, los sueños de los hombres que han vivido y de los que van a venir. Podemos acercarnos a los arquetipos a medida que comprendemos el Arte. Comprender el Arte es una forma de comprender a la Humanidad, los pensamientos, los sentimientos, los anhelos y las dudas del hombre.

El Arte y la evolución

El Arte abre un abanico de posibilidades al hombre que desea desarrollar sus poderes latentes. A medida que sean más elevados los sentimientos de una persona, más sensitiva será para el Arte y cuando despierten en ella sentidos superiores, el horizonte de su existencia se ampliará y descubrirá paraísos antes velados, ya que los mundos estéticos han sido creados para las almas estéticas.

El Arte es una disciplina necesaria para la superación de uno mismo. Un axioma griego afirma que el hombre cercano a la liberación debe tener un elevado sentido estético; de aquí se desprende que es posible conocer la madurez de las almas por la respuesta que dan ante el Arte y la belleza de las cosas.

El Arte y la educación

El Arte, al igual que la Filosofía, la Religión o la Ciencia, nos proporciona un acercamiento a la verdad respecto a los enigmas de la vida.

Enseña y educa al hombre: tiene la solución para todas sus preguntas y en él puede encontrar la unificación de su existencia cuando se halla perdido en un mundo que lo divide y lo mantiene disperso. En el Arte hay una magia especial que ofrece la posibilidad de autotransformación, de acelerar su proceso evolutivo por la asimilación de experiencias ajenas. El teatro griego, por ejemplo, tenía la cualidad de cambiar al espectador durante la representación; el ciudadano que salía de un teatro no era el mismo que el que había entrado, algo había cambiado en él. Al verse reflejado en la escena, se identificaba con los personajes, con sus alegrías y tristezas, sus cualidades y carencias; esto ejercía en él una limpieza psicológica y moral que le evitaba tener que soportar estos sufrimientos en su propia carne. Además, las estatuas no estaban encerradas en museos, sino en las plazas públicas. Palas, Apolo, Hermes y Zeus eran conceptos éticos petrificados que diariamente educían del ciudadano griego lo mejor que había en él.

El Arte nos torna sensibles; esto no significa de ninguna manera que debilite nuestro carácter, sino que lo armoniza equilibrando la suavidad con la fuerza.

Las formas de expresión son tímidos esfuerzos que el artista hace para dar forma, dentro de las limitaciones de nuestro espacio tridimensional, a las cosas que percibe en otros planos de existencia. Sin embargo, a veces se aleja de los conceptos estéticos y no es capaz de plasmarlos en sus obras; entonces, contaminado de imperfecciones humanas, refleja lo peor de sí mismo en su parte particular.

Existen formas "artísticas" que suponen una desvirtuación de los senderos del Arte. Este no nos muestra la pasión, el amor o la pesadumbre de un artista trastornado, sino la Pasión, el Amor o la Pesadumbre. Para los griegos, algo bello no era simplemente un objeto de admiración, sino que además le revelaban una ultérrima verdad.

El Artista

En el artista se observan ciertas facultades de las que carece el hombre común: tiene un sistema nervioso muy sensible y organizado; sus sentidos físicos (vista, oído, etc.) son más sutiles; el ojo del artista ve matices de color que no ve el ojo ordinario, ve belleza en líneas que pasan inadvertidas al hombre normal. Sin embargo, una cámara fotográfica puede reproducir imágenes con más fidelidad que la mano del artista. El refinamiento de los sentidos, pues, no es suficiente para crear Arte.

El artista ha de transformar lo que percibe con todo su ser; con las emociones, con la mente, con la imaginación, con la intuición, con el mismo espíritu. Todo lo que es el artista individualmente queda reflejado en su obra. No es posible un arte separado del artista: según sea su carácter, así será su arte. De ahí que es necesaria la purificación y que la técnica no es suficiente; a veces se percibe en un niño que canta algo sencillo un mensaje más puro que cuando un virtuoso interpreta la misma pieza. Para realizar su obra a la perfección, el artista ha de procurar que esté vivo y activo su espíritu interno.

Cuando lo logra, su alma se transforma en un vórtice de las fuerzas de la vida y llega a percibir los conceptos arquetípicos; entonces crea: con su imaginación moldea las cosas para adaptarlas a los ojos humanos. Es el "puente de oro" entre los arquetipos y la Humanidad, el molde en el que un divino artífice está pronto a verter un metal imposible. El artista es el sacerdote de la belleza.

Sus obras son fruto de su pasión y de su sacrificio, tal como expresó Leonardo en su diario: ¡Oh Dios, que vendes todos los bienes al precio de la fatiga!

Si posee facultades inusuales es porque alguna vez decidió romper sus propios límites y sigue rompiéndolos continuamente; ésta es su única diferencia. El problema es que esta decisión suele ser dolorosa y hace falta valor.

El mensajero del Arte crea un fenómeno transgeneracional; detenido entre dos infinitos, el artista propone las claves que pueden retornar al hombre su perdida identidad.

José Doménech

viernes, 4 de julio de 2008

Inauguración de la exposición de alumnos de Manuel Pelaez y Maribel Romero


El lunes 9 de junio se inauguró a las 8,30 la exposición de pintura de los Alumnos del pintor Manuel Peláez y Maribel Romero.

Presentó el acto Miguel Angel Padilla, director de la asociación e intervinieron los pintores describiendo toda la labor realizada por sus alumnos.

Entre los numerosos asistentes, familiares y amigos, podemos destacar la presencia de Enrique Pérez, coordinador del Distrito Centro, igualmente las pintoras Isabel Yeste y María Casas.

El acto se desarrolló con la mayor cordialidad, estando amenizado con un cóktail

jueves, 5 de junio de 2008

Anuarios de exposiciones desde 2001 a 2007

Desde su inauguración el año 2001 como un proyecto de voluntariado cultural de la Asociación Nueva Acrópolis en Málaga
muchos han sido los artistas y sus obras, muchas las ilusiones y las semillas de futuro que se han sembrado

Recogemos en estos anuarios las diferentes exposiciones que a lo largo de esta trayectoria se han ido desarrollando en la sala
Paco Moreno
Francisco Almansa
Pérez Almeda
Fernando Castillo
Isabel Roldán
Antonio Ubeda
Fabiola Aliaga
Manuel Burgos Fregenal
Manuel Peláez y Maribel Romero
Juan Real
Luis Jiménez
Conchi Quesada
Rafael Fernández Guerra
Alumnos de Manuel Peláez
Colectiva: José M. Moreno y Manuel Becerro
Gloria Pérez Egea
Pablo Madrid
Rosario Castro
Anuario de exposiciones 2003
Ismael Berrido Subires
Agueda Subires
Diego Ceano
Colectiva: Damas
Esculturas de Héctor Carnero
Francisco Sánchez Olivares
Luis Utrera y Rafael Herrero

Anuario de exposiciones 2004
Bernabé Alba
María Casas e Isabel Yeste
Manuel Becerro y Josefa Zea
Colectiva: Oleos sobre guitarras
Encuentro de Pintura: Diputación Provincial de Málaga
Dori Montiel
José Rueda
Conchi Quesada
Conjunta: Javier Moreno y Rafael Herrero

Anuario de exposiciones 2005
Alberto Moreno
Salvador Torres
Enrique Cabello
Mª Victoria Carrera
Ana Mª Millán
Consuelo Villanueva
Ignasi Puente Marrot
Colectiva: Alumnos de Conchi Quesada


Anuario de exposiciones 2006
Pilar Lasierra
Juan José Carretero
Antonio Quero
Anuario de exposiciones 2007
Alberto Moreno
Colectiva: Encarnación Prieto
Diego Ceano
José Manuel Fuster
Juan Jesús Simón
Cristóbal Córdoba
Javier Moreno
Francisco Portillo

miércoles, 21 de mayo de 2008

Inauguración de la exposición de óleos de Isabel Yeste y María Casas

El lunes 19 tuvimos la fiesta del arte, una nueva exposición de dos personas adorables. Un muy bella muestra del hacer silencioso del arte en lienzo.
Nos acompañó y presentó el acto la entrañable Belén Caballero, Concejala de El Rincón de la Victoria y popular presentadora de la televisión local.

Ella nos dirigió estas palabras que transcribimos:

Señoras, señores, buenas noches a todos.
En primer lugar, quiero dar las gracias a las artistas que exponen su obra desde hoy y hasta el próximo 6 de junio, por haberme invitado a compartir con todos este momento especial.

Antes de realizar una pequeña trayectoria por el trabajo de ambas, quiero dar mi enhorabuena a mi amigo Diego Ceano, coordinador de la sala. Él es como saben ustedes uno de esos malagueños que no pierden oportunidad para luchar por su tierra y por su gente, como creo que se demuestra en esta sala de exposiciones Al-Malaqui de Nueva Acrópolis, donde tenemos la oportunidad de poder disfrutar de un espacio abierto a los
artistas malagueños.

Y aunque no malagueñas de nacimiento, sí que lo son de corazón nuestras artistas de hoy.
Podría ser como dice el dicho, Isabel y Fernando, pero no, son Isabel y María o María e Isabel.

Una nacida en el municipio sevillano de Lentejuela, un pueblo que no llega a los cuatro mil habitantes, y que decidió echar raíces en Málaga, donde reside desde hace 36 años. Allí, con el arte corriendo por sus venas, nació María Casas.

Entre sus juegos infantiles siempre había un hueco para pensar en esa afición del mundo del dibujo y la pintura. Pero los tiempos no eran fáciles, así que María, tuvo que aparcar esta afición para dedicarse a otros menesteres.

La llama de su ilusión por plasmar en un lienzo aquello que ella sentía se ha mantenido siempre encendida, y es a partir del año 2.000 cuando María se centra más en esta labor y comienza sus primeras exposiciones.

En 2001 y 2002 expone en la sala del distrito centro en la plaza de la Merced. Un año más tarde lo hace en el Parque del Oeste dentro de la Semana del Mayor que organiza el Ayuntamiento de la ciudad, además en este corto espacio de tiempo es seleccionada para participar en el certamen Pro-tradiciones Malagueñas que convoca la asociación con mayúsculas la Coracha en la sala Cajamar. Ese trabajo, se ve recompensado en 2004 con el segundo premio del concurso de pintura Semana del Mayor.

No es la primera vez que esta sala acoge la obra de la pintora María Casas, ya que en 2004 sus cuadros colgaban por primera vez de estas paredes. Su última exposición, tubo lugar en la sala Miscelánea. Desde entonces, ha continuado su preparación y elaboración de distintos cuadros, que tenemos la oportunidad de ver esta noche.

El trabajo tanto de María como de Isabel es realista, configurando momentos casi en movimiento, que intentan plasmar objetivamente sus miradas a la realidad. Ese concepto equivalente de la instantaneidad como idea de captar un momento determinado, un instante fugaz, quizás un momento de luz, que sólo ellas son capaces de captar.

Y de esta artista de tierras sevillanas, a otra pero de tierras granadinas. En esta ocasión de una tierra que costó mucho conquistar, fue la última que se conquistó del reino de Granada por parte de los Reyes Católicos. Su nombre viene del origen de la palabra árabe “basti”, donde la cultura ibérica dejó huellas importantes como su Dama, ella, sin duda alguna es otra Dama de Baza de nombre Isabel.
Llegó a Málaga en 1972, cargada de hijos e ilusiones, motivo por el cual tampoco pudo dedicarse a esa gran pasión que siempre había tenido y que comparte con su hermana Lola.

Fue en el colectivo para mayores La Trinidad, donde Isabel pudo comenzar a desarrollar su afición, un tiempo más tarde comienza a recibir clases de formación de la mano del profesor y pintor malagueño Pérez Almeda.

No es esta la primera exposición donde podemos disfrutar de la obra de Isabel Yeste, ya que ha realizado varias colectivas en la Trinidad, los Claveles, sala del Mercado de la Merced o Parque del Oeste, entre otras.

En el año 2000, su obra “Con sabor a sal, fiesta y malagueñas”, es el cartel anunciador de la Feria y Fiestas Marineras del municipio de Rincón de la Victoria. Un año más tarde a la orilla del Mediterráneo en la sala Toré, realiza su primera individual.

Y en este 2008, cuatro años después vuelve a esta sala. El gusto, la delicadeza y el color son parte de la pintura de Isabel. Sus oleos de balcones cuajados de flores, invitan a sentarse. Sus jazmines desprenden el olor de las biznagas malagueñas, sus atardeceres o puestas de sol te sugieren momentos de paz y sosiego. Y si quieren se pueden perder en sus lienzos de rincones malagueños.

Isabel es perfeccionista en su trabajo, incansable hasta conseguir el efecto deseado. Yo le aplicaría a su labor algo que decía el director de cine Akiro Kurosawa: “las obras de arte nunca se acaban, sino que se abandonan” Porque les aseguro que si no Isabel siempre estaría perfilando su trabajo. Aunque tengo que decirles que para mi, la mejor obra realizada por Isabel la poseo yo y es una obra de arte de nombre “Jesús”.

Mi más sincera enhorabuena a ambas porque nunca es tarde cuando se tiene ilusión.
Cuando llegamos a la madurez y somos capaces de expresar nuestro arte o sentimientos en cualquier faceta, para ellas es la pintura. Y les pido que no se desanimen si no venden ninguna obra, Vincent Van Gogh sólo vendió una.


Belén Caballero





Aquí puedes ver las obras de María Casas



Aquí puedes ver las obras de Isabel Yeste






viernes, 9 de mayo de 2008

ARTE Y ARTISTA


"El Arte no solamente debe ser una expresión delhombre en un estadodeterminado deconciencia, sino que debeser la captación de unmisterio cósmico y de unmisterio humano".
J. A. LivragaConferencia, 1975


La dualidad arte-artista tiene el mismo valor que otras similares, como cuando, por ejemplo, nos referimos a un Ideal y a los idealistas, a la justicia y a los juristas, a la Ciencia y a los científicos, y así en otros tantos aspectos.
Un ideal es tal, gracias y a pesar de los idealistas, pero sigue siéndolo aunque no hubiese idealistas para vivirlo y transmitirlo. Los buenos idealistas lo engrandecen; los torpes lo ridiculizan, pero el ideal es un arquetipo fijo que permanece como meta para todos los que puedan superar las tinieblas personales y las circundantes.
El arte, como expresión de la belleza y reflejo de lo bello, es una realidad en sí aunque no existiera ni un solo artista que lo captara y lo hiciera visible en nuestro mundo.
Es el artista el que debe llegar a la altura del arte, y no contentarse con llamar "arte" a cualquier actividad o pretendida creación.
En la actualidad el arte está sujeto a variadas interpretaciones que resultan tanto más subjetivas cuanto más se esfuerzan por no serlo. Buena parte de los autores caracterizan el arte por dos factores: la creación y el desinterés. Por creación se entiende la facultad de producir cosas nuevas; y por desinterés, el "arte por el arte en sí", ajeno a otros intereses y ataduras. Pero ¿podemos hablar de verdadera creación de "algo nuevo bajo el sol".? ¿Podemos concebir un arte absolutamente libre, que no tenga relación con unos principios y unos fines?.
Esto nos lleva a otro escollo: ¿cuál es la finalidad del arte?. Volvemos a enfrentar varios intentos de respuestas que no nos dejan satisfechos: el arte es una imitación, un mimetismo, una forma de sensación o expresión, un recuerdo, una fórmula de perfeccionamiento moral... Y alrededor de estos presupuestos se siguen tejiendo más y más polémicas.
En nuestra opinión, la actual confusión de ideas, que afecta a principios, medios y fines, proviene de la necesidad ?que es en verdad temor- de dejar contentos a unos y a otros, de no dar la razón ni a unos ni a otros, de no aceptar el pasado ni pensar en el futuro, y de soñar con un presente siempre en movimiento que jamás alcanza la solera de la experiencia, el sabor del conocimiento profundo.
Sin duda, todo artista intenta expresar algo, todo filósofo intenta explicar algo, y aun en la perplejidad aparecen sombras de verdad. Pero no toda expresión o explicación puede llamarse arte o Filosofía.

EL ARTE
Analicemos algunos de estos puntos.
El arte es creación: si no lo es en el sentido absoluto de la palabra, sí lo es en el plano de la intuición-imaginación en que el hombre percibe los arquetipos, las Ideas genuinas, y recrea una y mil veces con ellas los sistemas de armonía del Universo.
El arte es imitación, bien sea de la Naturaleza viva, bien sea de aquellas Ideas que no están manifiestas a nuestro alrededor pero que la intuición puede aprehender. Esa imitación no le resta valor al arte sino que lo acrecienta, tanto más cuanto mejor imita y más se acerca a los Arquetipos; de la imitación se pasa entonces a la experiencia cierta de la Realidad.
El Arte es recuerdo, porque el alma, según Platón, tiene reminiscencias de su condición divina, y aunque no sean claras y precisas, son lo bastante poderosas como para impulsar buena parte de nuestras imágenes y de nuestros actos.
El arte es expresión, pero no de cualquier sensación, impulso o sentimiento desordenado; no puede ser la vía de escape de los estados anímicos del pretendido artista. Antes bien, debe expresar lo mejor del hombre y lo mejor que el hombre recoge del Universo en el que se integra. Sensaciones, sentimientos, ideas, intuiciones, deberían ser refinados y considerados como escalones necesarios, para comprender cada vez mejor los grandes misterios del alma y del mundo. El desconcierto, el vacío, el asco y el horror no son arquetipos: son el producto de la falta de arquetipos, y mientras sea eso lo que se exprese, no hay arte ni artista.
El arte es catarsis, aunque autores como Hegel no gustan de adjudicar al arte la perfección moral como finalidad, bien podría considerarse esa perfección como un efecto propio y natural, sin que por ello sea la finalidad. Ya los griegos vieron aquí una inapreciable fuente de purificación, justamente a causa del contacto entre el hombre y las Ideas arquetípicas. Ese contacto limpia el alma de escorias y le otorga la eterna juventud, ya que acrecienta la imaginación y la mantiene siempre despierta, siempre activa, siempre en busca de algo superior a lo ya obtenido.
El Arte evolución, en cuanto no se contenta con remedar lo cotidiano, sino que aspira a entonarse con las Leyes Universales. A pesar de quienes, como Hegal, otorgan más belleza a la creación del artista que a la Naturaleza misma (¿acaso Dios no es un artista?), preferimos aquella otra recomendación iniciática de La Voz del Silencio: "ayuda a la Naturaleza y trabaja con ella, y la Naturaleza te considerará como uno de sus creadores y te prestará obediencia. Y abrirá ante ti... los portales de sus cámaras secretas... sólo muestra sus tesoros al ojo del Espíritu..."(Compilación de antiguos textos tibetanos realizada en el siglo XIX por Helena P. Blavtsky).

EL ARTISTA
En cuanto al artista, empezaremos por señalar algunas características, pero sin ceñirlas a definiciones dogmáticas que menoscabarían la condición artística. Él es quien da a luz la obra de arte a través de su imaginación.
Para ello, necesita, pues:
Mente activa, capaz de captar, reproducir y transformar las ideas en imágenes estéticas.
Imaginación disciplinada y creadora, por completo ajena al desorden de la fantasía, y sí en cambio ligada a la intuición.
Inspiración, o poder intuitivo de la imaginación. Mucho se ha hablado de lo advenedizo de la inspiración, sin acertar a confirmar qué es lo que la provoca. Pero una imaginación poderosa y trabajada, es una vía segura de contacto con las ideas, es decir, de inspiración.
Talento y genio, aunque no son iguales ambos hacen falta y se complementan. El talento está en relación con la capacidad personal de expresión y trabajo artístico. El genio roza la inspiración. "El talento sin genio no pasa de habilidad".

El artista debe ser un verdadero "oficiante", un intérprete de la Naturaleza, un hábil mediador entre las Ideas Perfectas y los hombres. Esa es su misión: despertar el alma de sus observadores, y no sólo la admiración.

Estética y ética
Teniendo en cuenta esta propiedad transmutadora del arte y de los artistas, pasamos a valorar otro aspecto íntimamente ligado: la Estética en paridad con la Ética.
Habíamos dicho que el arte cumple una función purificadora, de transformación moral; aquí la Estética promueve la Etica, del mismo modo en que la Etica profunda y atemporal reaviva el concepto de Belleza.
Los conceptos éticos son inseparables de los estéticos cuando el arte lo es verdaderamente y cuando contiene un auténtico mensaje. Y no se trata de una ética superficial y variable como las modas, o acorde a unos u otros pueblos; es el conjunto de valores inalterables que han conmovido el alma de todos los hombres en todos los tiempos.
Todo lo que el artista es, queda de alguna manera reflejado en su obra, pues aunque su intuición actúe como un médium y pueda entrar en contacto directo con sus principios inspiradores, la personalidad ?humana? teñirá en parte la expresión concreta de esa intuición. Cuando su carácter es grosero, su arte ?si es que puede llamarse así- también será grosero y burdo, aunque los hombres de su generación, imbuidos de las mismas ideas, no lo adviertan en el momento. Aquí reside el secreto de lo metafísico plasmado en lo físico: la ética y la estética reflejadas en el arte, a través del artista.

No fueron ajenos a estas ideas quienes dedicaron al arte palabras como las que reproduciremos, y que sin agotar tema ni autores, son muestra importante de lo que pretendemos destacar.
"El arte trata fundamentalmente de las cosas reales y eternas, no de las temporales e ilusorias"(Jinarajadasa).
"el arte es el Alma desprendida del Hecho" (Carlyle).

Y es que, según lo que antecede, al arte no se agota en la mente que conoce los hechos, sino que requiere la acción intuitiva para llegar al "alma de los hechos". El arte, pues, en cualquiera de sus ramas, nos conduce a la esencia eterna de las cosas.
Esto es lo que hizo decir a Schiller que el arte es "lo que restituye al hombre su perdida dignidad", y afirmar a Wagner que es "el más potente impulso de la vida humana". Fue Wagner quien soñó con un arte Total, un conjunto lo bastante amplio como para conjugar al mismo tiempo magia y ciencia y como para cumplir una misión transformadora y renovadora en el hombre. Fue Wagner quien, con fuerza intuitiva y colosal inspiración, compuso su "credo", haciendo del arte una religión, una ética y una estética metafísica. Sus palabras son más que elocuentes para cerrar este trabajo.
"Creo en dios Padre, en Mozart y en Beethoven, así como en sus discípulos y en sus apóstoles. Creo en el Espíritu Santo y en la verdad del Arte, uno e indivisible. Creo que este arte procede de Dios y vive en el corazón de todos los hombres iluminados por el cielo. Creo que quien ha paladeado una sola vez sus sublimes dulzuras, se convierte a él y jamás será un renegado. Creo que todos pueden alcanzar la felicidad por medio de él. Creo que en el juicio final serán afrentosamente condenados todos los que en esta tierra se hayan atrevido a comerciar con este arte sublime, al cual deshonran por maldad de corazón y grosera sensualidad. Creo, por el contrario, que sus fieles discípulos serán glorificados en una esencia celeste, radiante, con el brillo de todos los soles, en medio de los perfumes y los acordes más perfectos, y que estarán reunidos por toda la eternidad en la divina fuente de toda armonía. ¡Ojalá me sea otorgada tal gracia! Amén."

Delia Steinberg Guzmán

miércoles, 30 de abril de 2008

Inauguración de la Exposición de Manuel Pelaez y Maribel Romero

El 28 de abril tuvo lugar la inauguración de la exposición de óleos de Manuel Peláez y de artesanía repujada de Maribel Romero en la Sala Al Malaquí de Nueva Acrópolis. La inauguración contó con la presencia de D. Enrique Perez, Dir del Área de Cultura, Juventud y Deportes del Distrito Centro, además de un gran número de asistentes que pudieron comprobar la destreza técnica del pintor y el cuidado exquisito en la realización de los repujados.
La Sala Al Malaquí, coordinada por Diego Ceano, se complace de poder ofrecer a Málaga una exposición de gran nivel y de seguir contribuyendo al desarrollo cultural de la ciudad ofreciendo espacios expositivos al margen de los circuitos comerciales por amor al arte, nunca mejor dicho.

jueves, 3 de abril de 2008

Próxima exposición de óleos de Manuel Pelaez y repujados de Maribel Romero


El 28 de abril (2008) se inaugurará la exposición del pintor Manuel Pelaez , que ya expusiera hace algunos años en la sala Al-malaquí con un extraordinario exito. Tambien se expondrán repujados de Maribel Romero.
La exposición durará hasta el dia 16 de mayo y se puede visitar en horario de tardes (de 18:30 a 21:00) en Málaga, Sala Al-Malaquí, en C/ Comedias nº5-1º.

Se puede visitar su pagina web personal en : http://personales.ya.com/arte-taller .
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MANUEL PELÁEZ GUTIÉRREZ
EXPOSICIONES:



1995. Grupo Obelisco Plaza de La Merced. Málaga. (Muestra aire libre)……………..……...…...Exposición Colectiva.

1996. I Semana Cultural de Telefónica. Málaga...............................................................................Exposición Colectiva.

1996. Salón de Otoño de El Corte Inglés. Málaga............................................................................Exposición Colectiva.

1996. Grupo Obelisco Plaza de La Merced. Málaga. (Muestra aire libre)…………..……….….....Exposición Colectiva.

1996. Sala de Exposiciones de Málaga Plaza. Málaga......................................................................Exposición Colectiva.

2000. Sala de Exposiciones Unicaja. Málaga..................................................................................Exposición Individual.

2000. Sala de Exposiciones Espacio Didier Daurat Aeropuerto de Málaga...............................................Exp. Individual.

2001. Sala de Exposiciones Casa de la Cultura Arroyo de la Miel Málaga.....................................Exposición Individual.

2001. Sala de Exposiciones Espacio Didier Daurat Aeropuerto de Málaga...............................................Exp. Individual.

2002. Sala de Exposiciones Al-Malaquí. Málaga...........................................................Exposición Individual. (Febrero).

2002. Sala de Exposiciones Al-Malaquí. Málaga.............................................................Exposición Individual. (Marzo).

2002. Sala de Exposiciones Latín American Art. Museum. Miami………….Del 24 de Julio al 15 Septiembre de 2002.

2002/3. Sala de Exposiciones Caesarea Galeri Art. Center. Norte Florida.. Del 1 de Octubre 2002 al 28 de agosto 2003.

2003. Sala de Exposiciones Castillo del Bil-Bil Benalmádena. Málaga……………….….......Exp. Individual (Octubre).

2003. Sala de Exposiciones Artemixa. Málaga………………………….……..……….……….Exp. Colectiva (Marzo).

2004. Sala de Exposiciones de Colegio Oficial de Médicos de Málaga. ………………..……..Exp. Individual. (Enero).

2005. Sala de Exposiciones Proyectos Miscelánea. Málaga………..…..………… Exposición Individual. (Noviembre).

2006. Cartel XIII Feria del Libro Antiguo y de Ocasión Málaga 2006… Inaugu- el 27-4-06 Museo Municipal Málaga.

2006. II Encuentro Pintores de Diputación Málaga 2006…………..………………..…..…..……………Exp. Colectiva.

2006. Sala de Exposiciones Unicaja Vélez Málaga…………………..……….………..…Exposición Individual (Junio).

2006. Sala de Exposiciones Royal Atenea. Roquetas de Mar. Almería……………...…Exposición Colectiva (Octubre).

2006. Sala de Exposiciones Colegio de Farmacéuticos de Granada………………...Exposición Individual (Diciembre).

2007. Sala de Conferencias y Exposiciones de Cajamar Málaga………………….………….Exp. Individual. (Febrero).

2007. Cartel Actos 2007 Hermandad de María Santísima de la Sierra. Parroquia de Santiago Apóstol. Días 28, 29, 30 de Septiembre. Málaga.

2007. Cartel Primer Encuentro Memorial Salvador Rueda. Organizado por la Academia de las Artes y las Letras Sta Maria de la Victoria. Día 2 de Diciembre. Málaga.


MARIA ISABEL ROMERO RUIZ
EXPOSICIONES:


2000………………………. Sala de Exposiciones Espacio Didier Daurat Aeropuerto de Málaga

2001……………………… Sala de Exposiciones Casa de la Cultura Arroyo de la Miel. Málaga.

2001……………………… Sala de Exposiciones Espacio Didier Daurat Aeropuerto de Málaga.

2002……………………………………... Sala de Exposiciones Al-Malaquí. (Febrero). Málaga.

2002……………………………...……….. Sala de Exposiciones Al-Malaquí. (Marzo). Málaga.

2003…………………………..……….. Sala de Exposiciones Castillo del Bil-Bil Benalmádena.

2004…………………….Sala de Exposiciones de Colegio Oficial de Médicos. (Enero). Málaga.

2005………..……………....Sala de Exposiciones Proyectos Miscelánea. (Noviembre). Málaga.

2006…………………….Sala de Exposiciones Unicaja Velez-Málaga Exposición (Junio-Julio).

2006………………...Sala de Exposiciones Colegio de Farmacéuticos de Granada. (Diciembre).

2007…………………...….Sala de Conferencias y Exposiciones de Cajamar. (Febrero). Málaga.

2007…………….. Cartel Actos 2007 Hermandad de María Santísima de la Sierra.. Parroquia de Santiago Apóstol. Días 28, 29, 30 de Septiembre. Málaga.

martes, 1 de abril de 2008

Sala de exposiciones Al-Malaquí, un proyecto de voluntariado cultural de Nueva Acrópolis en Málaga


La sala Al-Malaquí nació como un sueño albergado durante mucho tiempo, fruto de una vocación natural de las personas que formamos parte de esta Institución cultural que es Nueva Acrópolis en nuestra ciudad de Málaga, y varios amigos y conocidos, pintores, escritores e intelectuales. Entre ellos el escritor costumbrista y verdadero dinamizador de la cultura malagueña, Diego Ceano, de quien partió la idea y que coordina la sala desde entonces. Persona de una gran bondad y a quien estaré siempre muy agradecido por su impulso.
A todos nos une la sensibilidad ante lo bello y la creación artística, además de un compromiso por ofrecer aportes que contribuyan a hacer de nuestro mundo, un mundo más humano. Y sin duda alguna que el arte, cuando a la creatividad une la aspiración a la belleza, contribuye a ello.

Desde nuestros humildes medios, desde la acción y el tiempo desinteresado de voluntarios amantes de la cultura, se sostiene esta sala que año a año ha ido dando paso a numerosos artistas para que puedan ofrecer al gran público el fruto de su trabajo en el silencio creativo y fecundo. Desde aquí el sincero reconocimeinto y la gratitud, hacia todos aquellos que han colaborado y colaboran en este proyecto haciendolo posible.

Miguel Angel Padilla. Dir. de Nueva Acrópolis en Málaga